ARCÁNGELES DORADOS- WoW Clan
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

ARCÁNGELES DORADOS- WoW Clan

El foro del clan del magnífico juego MMORPG de ordenador, World of Warcraft.
 
ÍndicePortalÚltimas imágenesBuscarRegistrarseConectarse

 

 Historia de Relentex

Ir abajo 
2 participantes
AutorMensaje
Relentex
Nuevo
Nuevo



Cantidad de envíos : 1
Fecha de inscripción : 16/11/2008

Experiencia
Experiencia:
Historia de Relentex Left_bar_bleue0/0Historia de Relentex Empty_bar_bleue  (0/0)

Historia de Relentex Empty
MensajeTema: Historia de Relentex   Historia de Relentex Icon_minitimeDom Dic 07, 2008 2:23 pm

Mi nombre es Relentex que es el nombre que se da en mi antigua familia al frío y a la humedad. Lo adopté cuando regresé a la vida como no-muerto ya que decidí que, a partir de ahora, mi existencia estaría ligada a las sombras, al frío, a la humedad, al rocío helado, en definitiva, a la parte oscura del mundo.
Yo era un orgulloso humano, estudioso de todas las ciencias, que cometió el error de enamorarse de una princesa trol a pesar de que su raza era enemiga encarnizada de los que se suponían mis amigos y amigas. Su nombre era Pitinglis. Os contaré la historia de cómo nos conocimos y surgió el amor prohibido entre un humano y una trol. Yo estaba combatiendo en la Cuenca de Arathi cuando quedé malherido justo después de matar a mi agresor. Antes de tener tiempo para recuperarme, más enemigos aparecieron en el horizonte, una gran trol se acercaba. Temí lo peor, pensé que iba a acabar con mi vida. Levantó su hacha y cuando creí que era el final, me miró a los ojos y se dio media vuelta. Sus ojos eran profundos y limpios y dejaron huella en mí. No tenían nada que ver con lo que había aprendido en mis libros de ciencias que siempre demostraban que los miembros de la Horda eran por naturaleza crueles y sanguinarios. Intenté hablar con ella pero hablaba un extraño idioma y al poco, se vio obligada a irse siguiendo el fragor de la batalla. Sin embargo, gracias a los dioses, nos volvimos a encontrar y con paciencia, superamos los problemas del idioma, a pesar de que Pitinglis ni siquiera hablaba bien su propia lengua. A partir de ahí, el amor nos envolvió en sus redes y buscábamos ocasiones para encontrarnos siempre que podíamos.
Mis días enfrascado en los estudios de ciencias empezaron a ser más estimulantes porque sabía que al final de la jornada me encontraría con Pitinglis. Pero eso mismo me hacía dudar de todo aquello que leía y pasaba cada vez más tiempo discutiendo con mis compañeros y compañeras. Los libros presentaban pruebas de la maldad de la Horda pero yo tenía pruebas de la bondad de sus miembros, pruebas más convincentes que las que aparecían en esos libros. Poco a poco me fui separando de mis compañeros y compañeras. Ahora me di cuenta que fui necio porque yo pensaba que podía abandonar el grupo sin más y dedicarme a Pitinglis pero los demás me vigilaban de cerca y me veían como un peligro para sus ideas.
Ya no me esforzaba en discutir. Pasaba el día metido en mis libros y empecé a escribir pergaminos donde ofrecía pruebas contrarias a las que los sabios humanos habían construido durante siglos para calumniar a la Horda. Al final del día, dejaba la academia y me dirigía al encuentro con Pitinglis. No me di cuenta que alguien había empezado a seguirme.
Un día, estando juntos, uno de mis compañeros de la academia nos sorprendió. No nos dio tiempo a huir ni a reaccionar, en cuestión de segundos, habíamos caído en manos de una multitud de guardias de la Hermandad Escarlata. Nos separaron y aún hoy me tortura el pensamiento de saber qué pudieron hacerle a Pitinglis.
Fui conducido a una celda minúscula, sin luz, sin agua y sin comida. Las sombras habían empezado a ser parte de mi vida. Cada cierto tiempo, me sacaban de allí a empujones y me llevaban a un lugar siniestro con toda clase de instrumentos de tortura mientras me instaban a que renegase de aquellos escritos donde presentaba pruebas a favor de la Horda y reconociese la autoridad de los antiguos sabios humanos. Pretendían que me comprometiese a matar tantos miembros de la Horda como pudiese para acabar con el mal en el mundo. Pero yo sabía que el mal no estaba en la Horda y, sobre todo, debía ser leal a Pitinglis, estuviera donde estuviera, muerta o viva.
Un día mi cuerpo no resistió más y mi corazón dejó de latir. Cuando noté que me faltaba el aliento, me vino a la mente la imagen de Pitinglis y fue tal el odio que sentí hacía mis hermanos y tan fuerte mi amor por ella que mi corazón empezó a latir animado por estos fuertes sentimientos. Así fue como volví a la vida o mejor dicho a la no-muerte. Cuando desperté me di cuenta que mi aspecto había cambiado pero no me importaba, me gustaba estar en la parte oscura, en la sombra del mundo, donde podía hacer pagar a los humanos lo que me habían hecho y podía buscar a Pitinglis, si es que seguía viva. Desde entonces, el odio y la esperanza guían todos mis actos tanto en la batalla como en el estudio de las ciencias ocultas, oscuras, sombrías…
Volver arriba Ir abajo
NICKY_ALASTOR
Admin
Admin
NICKY_ALASTOR


Cantidad de envíos : 64
Edad : 30
Fecha de inscripción : 19/04/2008

Experiencia
Experiencia:
Historia de Relentex Left_bar_bleue63/100Historia de Relentex Empty_bar_bleue  (63/100)

Historia de Relentex Empty
MensajeTema: Re: Historia de Relentex   Historia de Relentex Icon_minitimeDom Dic 07, 2008 3:22 pm

HOLA!!!
Muy wena historia! Dudo que necesite ser pulida, esperfecta, tiene idea para el futuro y todo! Me sorprendiste enserio enorawena^^ xDDD
SALU2!!!
Volver arriba Ir abajo
http://www.psprogram.big-forum.net
 
Historia de Relentex
Volver arriba 
Página 1 de 1.

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
ARCÁNGELES DORADOS- WoW Clan :: GENERAL :: Juego de Rol y Quedadas-
Cambiar a: